La jornada pretende recordar el trabajo de los profesionales dentro de las aulas, además de su lucha por los reclamos legítimos.
Esta fecha es un homenaje a los docentes universitarios, que todos los días enseñan, aprenden, investigan y transfieren conocimientos a la sociedad, con el objetivo de ofrecer una enseñanza de calidad, poniendo a disposición de los alumnos su compromiso, responsabilidad y dedicación.
Cada 15 de mayo se conmemora en todo el país, el Día del Docente Universitario. La fecha no sólo pretende recordar el trabajo de los profesionales dentro de las aulas, sino también su lucha por sus reclamos legítimos a lo largo de la historia. Es, sin dudas, una de las efemérides vitales dentro del gremio docente.
La fecha como tal recuerda lo que fue el Correntinazo, un movimiento de protestas que incluyó manifestaciones y huelgas en la ciudad de Corrientes. Se produjo en 1969, en el medio de un clima de tensión y de protestas generalizadas contra la dictadura militar liderada por Juan Carlos Onganía.
El Correntinazo: ¿qué pasó y cómo fue esa jornada?
El 15 de mayo de 1969, la Federación Universitaria del Nordeste (FUNE) convocó a una movilización masiva al rectorado contra Carlos Walker, el rector de la Universidad Nacional del Nordeste. El motivo: los grupos movilizados denunciaron la intención del rector, en complicidad con el gobierno provincial, de privatizar el comedor universitario.
La protesta fue violentamente reprimida. En los alrededores a la Plaza Sargento Cabral, un vehículo policial abrió fuego directamente contra los estudiantes, produciendo la muerte del joven Juan José Cabral y hubo varios heridos.
La gesta, denominada con el tiempo el Correntinazo, marcó un punto de inflexión en la historia argentina, ya que para algunos historiadores significó el principio del fin para la dictadura de Juan Carlos Onganía.
Finalmente, la lucha estudiantil consiguió que no se privatizara el comedor de la universidad. Anteriormente, se había anunciado un aumento del 500% en los precios del comedor. Dos años después, en 1971, se consiguió derogar el ingreso eliminatorio en la Facultad de Medicina.